miércoles, 23 de diciembre de 2009

CONSORCIO DE EXPORTACIÓN

El tema de los consorcios es una forma asociativa que permite complementarse productivamente, proveerse de insumos a menor costo y producir en grandes volúmenes para satisfacción del cliente.
Para llegar a formar parte de este consorcio se debe ampliar el panorama del productor o vendedor y pensar que no es algo complicado ni engorroso para realizar trámites ya que no está sujeta a inscripción registral como otras opciones empresariales más sólidas que tienen que constituirse registralmente. Sobre todo que no tiene duración en el tiempo, puede concluirse en el momento que se decida o terminado un despacho. Pueden formar parte de este consorcio las personas naturales y/o jurídicas de todos los rubros comerciales.
Al formar un consorcio de exportación no significa que perderás derechos sobre tu negocio sino que es una forma eventual de cumplir los requerimientos externos en forma asociativa. Asimismo, tomarás experiencia para mejorar tu producción y la administración en forma individual una vez que quiera salir de este consorcio.
La opción de formar consorcios de exportación es una alternativa esencial si es que tenemos que satisfacer una demanda internacional con grandes volúmenes de venta. Sólo así las pequeñas empresas u organizaciones productivas pueden llegar a diferentes mercados del exterior y realizar las mejores estrategias comerciales en conjunto para el desarrollo de la actividad exportadora.
Es preciso decir que entre consorciados no habrá competencias sino simplemente estarán enfocados hacia un mismo ideal que es producir y vender el producto de acuerdo a lo que exige el mercado y satisfacer al cliente en volumen, precio y calidad.

martes, 15 de diciembre de 2009

COMUNIDAD CAMPESINA DE OMAS (YAUYOS)

Hace un par de semanas viajé al Distrito de Omas-Yauyos con el Director Agrario de la provincia de Mala. Se agrupó a representantes de la Comunidad Campesina de dicho distrito, quienes se dedican al cultivo de chirimoyas, maíz morado, manzanas, entre otros. Tienen grandes hectáreas de cultivo. Lamentablemente, no tienen una adecuada organización y fue una reunión donde se agrupó a diferentes asesores en el tema, entre ellos, un ingeniero agrónomo experto en el cultivo de chirimoyas, un asesor de la financiera Agrobanco y mi persona quien les planteó la necesidad de elaborar un “Plan de Negocios de Exportación”. El interés de ellos estuvo enfocado en conocer la forma de utilizar mejor sus tierras y los insumos a emplear. Ellos actualmente venden sus frutos a un mercado de la zona y se mostró poco interés por querer incursionar en el comercio exterior.
No obstante, pude observar rostros de interés, por conocer de qué trataba un Plan de Negocios pero solo quedó ahí porque lo que más les interesaba era la forma de cómo tener mayor producción. No digo que está errado su proceder sino que deberían enfocarse en cómo obtener mayores incrementos sacando sus productos al exterior. Entregué unas encuestas para conocer mejor la problemática de su organización pero muchos lo devolvían en blanco y otros se lo llevaron. Muy pocos me entregaron el documento con información, lo que demuestra un total desinterés en su progreso. El Presidente de la Comunidad estaba bastante interesado en el tema y me informó que iba a convencer a su gente porque en realidad necesitan contar con un plan para la toma de decisiones, buscar oportunidades de negocio, nichos de mercado para que se diferencien de los demás y no seguir vendiendo localmente cuando pueden ser competitivos, obtener mayores ganancias y mejorar su forma de vivir exportando sus productos con un adecuada proyección a futuro contando con un correcto plan de negocios.
Entiendo que debe ser algo extraño para ellos y que crean que somos engatusadores pues son organizaciones a quienes les falta abrir su panorama ya que se encuentran encerrados en sus ideas y en el pasado. Además que entiendo el desconocimiento por lo que pasa a su alrededor, ya que no cuentan con señal para poder comunicarse (no hay comunicación telefónica ni internet). El gobierno debería preocuparse mucho más por estas zonas, más aún, cuando se encuentra dentro de la capital. Esperemos que esta comunidad cambie su manera de pensar y que crean que hay personas que se encuentran dispuestas en trabajar conjuntamente su producto y que será una buena inversión para lo largo de sus vidas. Además que deben optar por alternar algunos cultivos que no son tan rentables para una exportación como es el caso de las manzanas delicias.
Ayer sostuve reunión con el Director Agrario de Huacho, al otro lado de la ciudad de Lima, quien me mencionó que hay comunidades que cultivan la chirimoya orgánica, palta orgánica y melocotón. Realizaré las visitas respectivas para conocer más acerca de su organización y producto con el fin de trabajar un plan de negocios de exportación. Les comentaré.

jueves, 3 de diciembre de 2009

MI EXPERIENCIA IMPORTANDO ACCESORIOS DE VEHICULOS DESDE ESTADOS UNIDOS

Hace un par de meses realicé mi primera importación. Todo empezó porque un amigo tuvo la necesidad de comprar accesorios desde Estados Unidos para su vehículo de colección, esto es, un Chevrolet del año 1950. De paso que ponía en práctica mis estudios en comercio exterior me tiré al ruedo y decidí apoyarlo.
En primer lugar, solicité cotización con el proveedor extranjero por la mercadería de interés que consistió en dos parachoques (delantero y trasero) y un grill o parrilla. Revisamos los precios de venta que ofrecía el proveedor americano y se encontraban por la mitad del precio que costaban en Perú. Aún así, la decisión de realizar la operación demoró semanas por la misma inseguridad que presentaba mi amigo por tratarse de una primera importación, por el desembolso en efectivo que tenía que realizar y si finalmente recibiría la compra por lo abonado.
No obstante, averigüé costos de agenciamiento de carga aérea toda vez que el volumen de la mercadería llegaba a pesar menos de 1 TM, pues convenía realizarlo por esta vía que cotizan de acuerdo a los kilos de la carga a diferencia de la carga marítima cuyo tarifario es mínimo por TM. No requerí de agenciamiento de aduanas ya que por ser una mercadería que no sobrepasaba los US$ 2,000 dólares, podía realizar la operación mediante una Declaración de Importación Simplificada (DSI), pues esta operación lo puede realizar el mismo beneficiario o mediante una carta poder legalizada autorizando a un tercero la realización del trámite.
Después de la conformidad definitiva de mi amigo (importador) se ordenó la importación de los accesorios cancelando con tarjeta de débito lo solicitado e informando que la mercadería sea depositada en el almacén aéreo (sucursal en EE.UU) de la agencia de carga contratada. Posteriormente recibí las facturas originales y la mercadería fue despachada.
Después de 15 días aprox. arribó la mercadería, el agente de carga me entregó la documentación faltante (AWB o guía aérea y lista de empaque) y me apersoné al terminal de almacenamiento (Shohin) adjuntando, además, la factura original, la carta no seguro y la declaración simplificada de importación. Como la lista de empaque estaba en idioma inglés tuve que hacer una declaración jurada manual con la traducción de los productos y la firma del importador.
Ingresé la documentación completa a las 3.00 pm., hora límite para la recepción de documentos. Sin embargo, el vista (así se llama a los especialistas aduaneros encargados de revisar tu mercadería) para el aforo físico se había retirado antes de su hora usual informándome que tenía que regresar al día siguiente para que la mercadería sea aforada y numerada, pagando un día más de almacenaje. No conforme, descargué mi queja ante la Aduana Aérea (ubicada en el Centro Aéreo) e insistí con uno de los Intendentes para que mi carga sea aforada el mismo día por tratarse de un incumplimiento en el horario del especialista. Después de una hora de insistencia aceptaron mi reclamo y salí con uno de los vistas directo al terminal de almacenamiento para el aforo físico.
Creí que lo peor había pasado. El terminal de almacenamiento atendía hasta las 5.00 pm y pasada la hora cobraban hora extra que era un monto mayor a que si dejabas tu mercadería por un día más de almacenamiento. Tenía media hora para lograr retirar mi mercadería en el día, es decir, para que el vista afore la mercadería en el terminal, volver a la Aduana a recoger mi liquidación de impuestos, acercarme al banco a cancelar los derechos de importación, regresar a la Aduana para entregar los recibos cancelados y obtener el permiso electrónico. Al tener todo en regla llegué al terminal de almacenamiento minutos antes de las 5.00 pm cancelando el día actual de custodia de mercadería y obteniendo el permiso para el retiro de la mercadería.
Esta buena experiencia me sirvió para darme cuenta que para lograr buenos resultados frente a tantos obstáculos tienes que agotar los últimos intentos para la satisfacción final de tu cliente, toda vez que lo que ellos quieren es tener la mercadería en sus manos y no tener que pagar un adicional más que lo proyectado en cancelar hasta ese momento.